Longitud de onda: su luminosidad dependerá del efecto brillante de la reflectancia del material, sin embargo la sensación visual corresponde a un matiz del color amarillo (565–590 nm), cercando al del metal oro.
Etimología: Del Latín aurum – del metal oro –.
Nombres o matices de dorado: doradura, estofado, metal, metalla.
El color oro o dorado, está emparentado con el amarillo. Pero en el simbolismo, el oro no se parece a ningún otro color. Quién piensa en él, piensa ante todo en el metal precioso. El oro significa dinero, felicidad y lujo, sentimiento de alegría y viveza pero también un aura sombrío y tradicional. Es el color que más se asocia a la belleza, pero también es demasiado materialista y arrogante.
Los matices del oro están determinados por los metales con él mezclados. El oro amarillo, el oro “normal”, contiene plata y cobre. El oro rojo contiene cobre. Las joyas antiguas son en su mayoría de oro rojo, antes considerado el oro más hermoso. Independientemente de su matiz, el oro siempre corresponde a lo valioso y lo extravagante. Según el pintor Gustav Klimt, todo lo que está rodeado de oro es noble.
El oro es también el color de la felicidad. Oro y dinero son conceptos inseparables. Muchos países tenían como moneda la “corona” y una corona real es siempre de oro. Todo lo que sirve para ganar dinero también está relacionado con el oro: un cantante exitoso tiene una “voz dorada”, un futbolista exitoso gana el “botín de oro”. El petróleo es el “oro negro” y en otros tiempos, la porcelana y el marfil eran el “oro blanco”. Todo lo que se vende caro, acaba siendo oro. Hasta hace unos años, en fútbol el “gol de oro” otorgaba la victoria, y con ella la fama y el dinero, después de un juego indeciso.
El dorado es también el color del orgullo y uno de los colores relacionados con el mérito. Es el color de la fama. En todos los ámbitos hay galardones de oro: los Premios Oscar son estatuillas de oro; en el cine también se otorgan los Globos de Oro, y en industria francesa de la moda se otorga el Dedal de Oro. El oro es también uno de los colores relativos a la fidelidad: la expresión “fiel como el oro” hace alusión a que cuando el oro no está fundido no se combina con ningún material.
Es el más reciclado de todos los materiales, nunca se tira, siempre se recupera. Nunca pierde su valor. El oro es el color de la permanencia. Este color acompaña a las cualidades que se mantienen con los años: la fidelidad, la amistad, la honradez y la confianza, pero nunca es el color predominante junto a estas cualidades, pues su carga de materialismo siempre se hace patente.
El oro, por su parentesco con el amarillo, se encuentra asociado al Sol. Según una antigua creencia, el oro se forma con sus rayos. Para los incas, el oro era la sangre del Sol. Al ser el material más noble, el oro es masculino, y su opuesto femenino es la plata. En las religiones que adoraban a los astros como seres divinos, los dioses solares son siempre masculinos.
El oro es el color de la belleza, la pompa y la solemnidad. Los trajes dorados y los brillos se encuentran reservados para las fiestas. Las joyas de oro antiguamente identificaban a los ricos, a la nobleza. Pero hoy en día los tejidos dorados ya no son nada de extraordinarios. Son demasiado llamativos para resultar elegantes. Hoy en día ningún miembro de una casa real llevaría un traje de noche dorado.
El oro es el color del lujo. Aquellos objetos que no pueden fabricarse en oro, reciben un baño dorado y automáticamente pasan a ser objetos de lujo. Es el color del deslumbramiento y uno de los colores de la vanidad. Es uno de los colores de lo artificial. Las grandes superficies doradas atraen por su belleza, pero parecen distantes pues representan al poder. Es el color de lo presuntuoso.
En pintura, el color oro siempre estuvo ligado a los cuadros de motivos piadosos. Los iconos rusos han conservado hasta hoy ese fondo dorado. Este color tiende a pegar con los colores de la tierra, pero también puede enriquecer una paleta de rojos o borgoñas. Hoy el oro ha desaparecido de las pinturas, pero sigue estando presente de otra forma: la mayoría de los cuadros de las pinturas aún son de color dorado. El papel dorado y el plástico dorado no contienen oro. En la publicidad se habla de lo dorado, pasta dorada, pan dorado, margarina dorada, porque este estilo incita al consumo, a la idea de lo preciado. “No todo lo que brilla es oro”, en publicidad, el color oro no expresa ningún valor, solo es presuntuosidad.
El 1% de las mujeres nombra al oro como su color favorito. ((HELLER, Eva, Psicología del color, Editorial Gustavo Gili S.A., 2004, Barcelona – ESPAÑA.)) En los hombres casi ninguno lo considera como tal. El 2% de las mujeres y el 3% de los hombres declaran que el color oro es el que menos les gusta.
Imágenes de Edgley Cesar, wakalani, _setev, y premasagar